El presidente Evo Morales exigió ayer a las autoridades ediles consignen espacios y flexibilicen normas internas para construir más edificios en la ciudad de La Paz, y anunció la construcción de caminos asfaltados para rescatar el turismo en la zona del altiplano, pero anunció de manera contundente que rechazará la apertura de más zonas francas por ser focos de contrabando y corrupción.
El Jefe de Estado en la sesión de honor de la Asamblea Legislativa Departamental, dijo que el PIB per cápita paceño subió bastante en los últimos años. De 887 dólares el año pasado a 2.336 dólares y destacó que a través del programa “Bolivia Cambia, Evo Cumple”, hay un término medio de 37 proyectos por municipio.
En su discurso se refirió al predio donde está la cárcel de San Pedro y expresó su disposición de construir en esa área (cercana a 8 mil m2) un gran centro cultural o un centro de convenciones internacionales y señaló que La Paz, siendo Sede de Gobierno, necesita ampliar su infraestructura para la gestión pública.
En tono de reclamo a las autoridades municipales paceñas ausentes en esa sesión, el Presidente dijo que en La Paz es difícil conseguir espacios para nuevas oficinas de trabajo, porque so pretexto de “patrimonio” impiden la construcción de nuevos edificios como la Casa Grande en lugar del actual Palacio de Gobierno que quedó como una “ratonera”, así como la Asamblea Legislativa.
Dijo que algunas autoridades se oponen por razones políticas cuando lo ideal sería juntar esfuerzos para hacer grandes obras como la construcción de un coliseo exclusivo para básquet con capacidad para 5 mil personas que está dispuesto a construirlo siempre que tenga terreno, al igual que otros campos deportivos.
Resaltó la inversión del Gobierno central para integrar el norte boliviano con la carretera Santa Bárbara-Quiquibye-Yucumo-Riberalta; otra Patacamaya-Coro Coro Caquiaviri-Hito IV que unirá a Bolivia las costas del Pacífico en el lado peruano; carretera Escoma-Apolo de 300 km, que integrarán las provincias Camacho, Muñeca, Bautista Saavedra y Franz Tamayo con una inversión cercana a 600 millones de dólares a razón de 2 millones de dólares/km; y una política para recuperar la actividad turística de Sorata.
El mandatario puso énfasis en la necesidad de eliminar las zonas francas por considerar que son fuentes de corrupción y contrabando y aseguró que por ese motivo, no dio curso a muchas solicitudes de creación de esos espacios comerciales. Morales se mostró agradecido con el departamento y la ciudad de La Paz por el apoyo político durante la crisis por el Tipnis.
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