El presidente Evo Morales anunció este sábado que no esperará los resultados de ninguna auditoría nacional o internacional, que se pueda hacer a los datos finales del Censo de Población y Vivienda 2012, para empezar a planificar nuevas políticas del Estado en base a lo presentado de manera oficial por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Sin embargo, reconoció que fue un error dar a conocer información preliminar sobre este proceso en enero pasado.
“No tenemos por qué esperar los resultados de las auditorías, vamos (empezar) a aplicar los resultados finales (del Censo), sin embargo, las auditorías están abiertas (...) seguir esperando que haya resultados de auditorías e investigación sería perjudicar a las alcaldías y departamentos, no podemos perjudicarlos”, manifestó el Presidente.
Morales, en rueda de prensa en el Palacio de Gobierno, aseguró que los datos del Censo son oficiales y bien procesados, aunque están a disposición de quienes quieran realizar cualquier tipo de verificación.
“Quiero decirles que no hay nada que ocultar frente al pueblo boliviano. He escuchado algunos pedidos de algunas autoridades, he escuchado el pedido de algunos movimientos sociales; quiero decirles, los datos están disponibles para cualquier auditoría nacional o internacional”, declaró el Presidente.
El 24 de enero de este año, Morales, con base a la información preliminar del Censo, dijo que Bolivia tenía 10.389.913 habitantes; seis meses después, el 31 de julio, la ministra de Planificación del Desarrollo, Vivienda Caro, señaló que en el país oficialmente hay sólo 10.027.254 pobladores.
De acuerdo a los datos de enero y los divulgados en julio, existe una diferencia de 362.659 habitantes, lo que significa que hay un margen de error entre una y otra cifra de 3,49 por ciento.
Esta diferencia de cifras provocó indignación en varias regiones del país. Incluso, ayer un grupo de jóvenes de Santa Cruz hizo una clausura simbólica del nuevo predio del INE en Santa Cruz.
El Primer Mandatario reconoció que no fue una buena decisión dar datos preliminares del censo.
“Autocríticamente reconocemos que ha sido un error anunciar los datos preliminares del censo de población y vivienda. Datos informados de manera preliminar, no eran datos oficiales”, señaló.
Morales argumentó que se lanzaron los datos preliminares porque hubo presiones de distintos sectores.
“A exigencia, a insinuaciones de muchas autoridades, yo pedí hacer conocer rápidamente, creo que ese es el error que hemos cometido de anticipar algunos datos preliminares”, sostuvo el Presidente.
Advierte un desclasamiento de los bolivianos
Un total de 4.032.014 de personas mayores de 15 años se declararon como “ningunos” porque no se autoidentifican con ningún pueblo indígena; mientras que 2.806.592 se declararon indígenas u originarios pertenecientes a algún pueblo. Los restantes 3.188.648 habitantes de Bolivia son menores de 15 años y no pudieron declarar su autoidentificación cultural.
A diferencia del Censo del 2001, cuando se declararon 6 de cada 10 personas como pertenecientes a un pueblo indígena u originario, el último dato estadístico refleja que ese número bajó considerablemente, pues, cuatro de cada seis habitantes se declara no perteneciente a ningún pueblo indígena o, en algunos casos, se autoidentificó como mestizo, término que generó mucho debate en las previas del Censo de noviembre pasado. Morales dijo que le sorprendieron estos datos.
“A mí también me ha sorprendido, los datos anteriores eran muy diferentes, no sé si estamos en una etapa de desclasamiento o en una etapa de mayor mentalidad colonizadora, es debatible, para mí eso es secundario, los datos se respetan, así como en el cacho, lo que se ve se anota”, apuntó.
Dejó a los analistas y sociólogos interpretar los resultados sobre el número de indígenas en el país.
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