domingo, 6 de julio de 2014

Presidente Morales: “Mis delitos son ser indígena y antiimperialista”

El 2 de julio se cumplió un año del secuestro del avión presidencial de Bolivia. El presidente Evo Morales, al recordar ese hecho, se preguntó: “¿Pero cuál es mi delito? Ser indígena y antiimperialista para ser secuestrado en Europa, lamento mucho decirles porque yo no sé si con los hermanos dirigentes de Europa hay que juntarnos también para liberar Europa de Estados Unidos”.
Morales habló en esos términos en la clausura del Encuentro Sindical Antiimperialista, en la ciudad de Cochabamba, donde recordó además que el 2 de julio de 1781 “la hermana Bartolina Sisa cae prisionera cuando comandaba y se dirigía al campamento de Pampahasi, sus mismos compañeros lamentablemente la traicionaron y la entregaron a los españoles, la condujeron presa a la ciudad de La Paz”.
Bartolina Sisa, mujer de Tupac Katari, fue ahorcada el 6 de septiembre de 1782, mientras que el líder indígena fue ejecutado en Peñas el 15 de noviembre de 1781, y antes de morir dijo: “Yo muero, volveré millones”.
“Ésta es la historia, a la compañera Bartolina Sisa la detienen el 2 de julio en 1781, y casualmente, qué coincidencia, el secuestro presidencial se da el 2 de julio, hace un año”, comentó el mandatario.

Toda una odisea
El presidente Morales partió la noche del viernes 28 de junio de 2013 rumbo a Managua, la capital de Nicaragua, donde llegó la madrugada del sábado 29 y participó en la VIII Cumbre de PetroCaribe, y expuso sobre los logros obtenidos por Bolivia tras la nacionalización de los hidrocarburos el 1 de mayo de 2006.
Al día siguiente, domingo 30, se dirigió a Moscú para asistir a la II Cumbre de Países Productores y Exportadores de Gas, los días 1 y 2 de julio. En la capital rusa se entrevistó con el presidente Vladimir Putin, con quien llegó a importantes acuerdos para fortalecer la política hidrocarburífera.
El martes 2 de julio, el avión presidencial FAB O1, de acuerdo con un plan de vuelo, despegó de Moscú luego de obtener la autorización de Francia de sobrevolar su espacio aéreo y la negativa de Portugal por “problemas técnicos”.
La nave realizaba su recorrido, pero cerca a una hora del espacio francés las autoridades de ese país revocaron la autorización. Tras ello se hicieron las gestiones ante Viena, Austria, que finalmente dio su aprobación y el avión pudo aterrizar de emergencia.
Esa situación fue denunciada en La Paz, ese mismo día, por el canciller David Choquehuanca, quien dijo que las autoridades de Francia y Portugal le negaron a la aeronave utilizar su espacio aéreo por sospechas de que Edward Snowden se encontraba a bordo.
El presidente Morales fue acusado infundadamente de que en el avión presidencial se encontraba el exanalista estadounidense de la CIA Snowden, de quien dijo que Bolivia consideraría el punto si pide asilo. Snowden permanecía esos días en la zona de tránsito del aeropuerto moscovita.
Sin embargo, Estados Unidos extremaba medidas para lograr su extradición porque lo consideraba “un criminal” por divulgar secretos de Estado, al extremo de que la Embajada estadounidense en La Paz presentó su solicitud de extradición, sin que Snowden haya pensado asilarse en Bolivia.

“Potencias imperialistas quieren mantener el orden establecido”

El presidente Evo Morales logró un reconocimiento mundial forjado con un discurso bastante duro contra Estados Unidos y el imperialismo; además, “la existencia de procesos progresistas, antiimperialistas en varios países coincidió para que la denuncia (contra el atentado) sea muy fuerte”, opinó el sociólogo Eduardo Paz Rada.
Mientras que para el historiador Luis Oporto Ordóñez “fue como una gran campaña la simpatía que provocó a nivel internacional, lo catapultó a niveles insospechados, en un típico boomerang”.

Intervención

Tal como en su momento ocurría con la Colonia española, en nuestros pueblos, ahora “los mecanismos de intervención de las potencias imperialistas son diversas, y el principal es el económico, financiero y de las transnacionales”, indicó.
El objetivo de estas acciones es “mantener un orden internacional que está en crisis, pero que es la base de su existencia, tienen grandes intereses y recursos para administrar y tener grandes ganancias”.
Sin embargo, advirtió que desde el año 2008 no hay embajador de Estados Unidos en Bolivia y “no hay crisis, la multipolaridad (con China, Rusia, India) genera mayor soberanía y dignidad frente a políticas que eran antes impuestas por Washington”.
El historiador Oporto considera que “mientras más avance el fortalecimiento económico, será poco amistoso para Estados Unidos entender que cuando un presidente tiene apoyo popular es más difícil derrocarlo y atentar contra su vida”.
“Nunca nos van a asustar, nunca nos van a amedrentar, porque somos un pueblo que tiene dignidad y soberanía”, afirmó el presidente Morales al retornar al país la noche del 3 de julio del año pasado.
“Siento que es una abierta provocación al continente, no sólo al Presidente. Usan a su agente del imperialismo norteamericano para amedrentarnos e intimidarnos”, dijo.

Organismos condenan agresión y piden a europeos disculparse

Los Gobiernos de Francia, Portugal, Italia y España violaron preceptos establecidos en la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, de 1961, y el Convenio de Chicago, de 1944, que tiene que ver con el tránsito aéreo internacional, al impedir el sobrevuelo del avión presidencial boliviano.
El atentado fue inmediatamente condenado por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), integrada por 12 países, que se reunió el 4 de julio en Cochabamba, que en el primer punto de la declaración aprobada dice: “Declaramos que la inaceptable restricción a la libertad del presidente Evo Morales, convirtiéndolo virtualmente en un rehén, constituye una violación de derechos no sólo al pueblo boliviano, sino a todos los países de Latinoamérica, y sienta un peligroso precedente en materia del derecho internacional vigente”.
Además pidieron que los Gobiernos de Francia, Portugal, Italia y España expliquen las razones de la decisión de impedir el sobrevuelo, y que presenten las disculpas públicas correspondientes.
El G77, conformado por 130 países y el Movimiento de los Países No Alineados, rechazaron los actos “injustificados e inamistosos” de cuatro países europeos contra la seguridad del presidente Morales.
El Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) condenó, a través de una resolución, el bloqueo al mandatario Morales y llamó a los cuatro países europeos a explicar las razones y a disculparse.
“Un Jefe de Gobierno y su aeronave gozan de inmunidad e inviolabilidad”, dijo el secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, al indicar que era importante evitar incidentes similares en el futuro.

Estados Unidos estuvo detrás del atentado

La injerencia del Gobierno de Estados Unidos en el atentado al presidente Evo Morales es evidente. “La orden no fue unilateral, fue una instrucción muy precisa de un poder más alto, analistas dicen que vino de Estados Unidos”, dijo el historiador Luis Oporto Ordóñez.
“La Embajada de Estados Unidos en La Paz presentó pedido de extradición, la instrucción salió de esos niveles. Lanzaron una advertencia a los presidentes progresistas que buscan la independencia económica con la industrialización, quieren perpetuar el que sólo suministremos materias primas. No es casual que Estados Unidos hubiese montado una red de espionaje mundial, se sobrepone el interés de la seguridad nacional de Estados Unidos, desde el atentado de las torres gemelas (el 11 de septiembre de 2001, por Al Qaeda)”, apuntó.
Oporto subrayó que “en política internacional no hay escrúpulos, cualquier presidente puede sufrir algún atentado, se puede ir más allá. Hay denuncias de que Yasser Arafat y Hugo Chávez, presidentes de Palestina y Venezuela, respectivamente, no murieron por causas naturales, el primero envenenado y el segundo por un cáncer provocado. Antes controlaban con golpes de Estado, con dictadores, ahora es más sutil y efectivo”, expresó Oporto.

Acuerdos de inteligencia

El sociólogo Eduardo Paz Rada considera que no debemos olvidar que “existen acuerdos de inteligencia muy fuertes entre Estados Unidos y Europa, con la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), los mecanismos son muy poderosos, actúan en comunidad y éste fue uno de ellos para evitar algo que mostraba como una agresión de alto nivel”.
Ese 2 de julio de 2013 el Embajador de España en Viena le planteó al presidente Morales hacer una revisión, lo que fue rechazado por el mandatario. “Estados Unidos y potencias pueden decidir y hacer lo que quieren para mostrar que son un poder mundial y que pueden generar una crisis secuestrando un avión, se combinan ambas cosas, hay un poder mundial y también es una muestra de que existen debilidades en los servicios de inteligencia de países tan poderosos (al presumir que iba Snowden)”, opinó Paz Rada.

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