Evo dice a Bachelet diálogo sí, pero no “diálogo de sordos”

Después de conocerse la decisión de la candidata presidencial chilena Michelle Bachelet de incorporar en su propuesta de gobierno el retorno al diálogo con Bolivia, el presidente Evo Morales expresó su disposición a escuchar esa propuesta, pero que ésta sea por escrito. Además, dijo que el diálogo debe darse en forma paralela a la demanda marítima en la Corte Internacional de Justicia (CIHD), que ya está en curso.
"Si hay un diálogo, (y) hay una propuesta escrita que acompañe la solución de salida al mar con soberanía, estamos acá para debatirla”, sostuvo el Jefe de Estado en una conferencia de prensa en la ciudad de Sucre.
Morales se refirió al tema seis días antes de las elecciones presidenciales en la República de Chile y en un escenario electoral favorable –de acuerdo a encuestas en ese país– a la candidata de la alianza Nueva Mayoría, Michel Bachelet, con quien en 2006 se construyó una agenda bilateral de 13 puntos.
Bachelet planteó en su plan de gobierno "Chile de Todos” –sobre Bolivia – "retomar el camino del diálogo” y la confianza mutua que se había logrado entre 2006 y 2010, que se congeló desde que el país decidió acudir a los tribunales internacionales por una salida soberana al Pacífico.
Desde Santiago, el canciller chileno, Alfredo Moreno, también apostó por el diálogo, lo que sería "positivo” para ambos países, dijo citado por EFE.
Mientras tanto, el expresidente Carlos Mesa respaldó las declaraciones de Morales.

"El Presidente (Morales) dice que sí estamos abiertos al diálogo y siempre hemos estado abiertos al diálogo, lo cual es verdad, pero queremos ‘un diálogo con resultados’ y creo que es una frase afortunada”, dijo.

Punto de vista
ARMANDO LOAIZA
Excanciller y diplomático
"Es una actitud positiva "
Me parece loable que se abra una actitud más constructiva de un eventual diálogo entre Chile y Bolivia, si es que acaso prevalece la señora Michel Bachelet en las próximas elecciones de Chile.
Es una actitud muy positiva de la Cancillería, porque deja de lado ese tono tan crispado y duro que prevaleció desde la reunión de Tiquipaya.
Sin embargo, el plan de gobierno de la alianza que sostiene a la señora Bachelet habla de la confianza recíproca y del diálogo, pero ignora la agenda de los 13 puntos, porque los políticos consideran que antes de hablar sobre el tema marítimo se debe dilucidar la demanda ante la Corte Internacional en La Haya.
La apertura al diálogo que se plantea es positiva, sin lugar a dudas.