Los lamentos de que la oposición no se unió y que la campaña de los partidos no oficialistas está en desventaja respecto a la candidatura del Movimiento Al Socialismo configuran dos frentes nítidos: a) Oposición desmoralizada y b) Oficialismo con reales perspectivas de reelección.
Las encuestas de la empresa Mori, difundidas con exclusividad por El Deber de Santa Cruz, reafirman la tendencia política de que el candidato del Movimiento Al Socialismo, Evo Morales Ayma, es favorito en la proyección del voto para el próximo 12 de octubre con un tentativo 54 por ciento, que podría aumentar en las semanas restantes para los comicios.
Portavoces de oposición, antes de esta muestra, rechazaron los resultados de varias encuestadoras que, prácticamente, con pequeños matices, coinciden con el rastreo actual de la empresa Mori. Es decir, que la tendencia es favorable para el postulante del MAS; desfavorable para los candidatos de Unidad Demócrata, Movimiento Sin Miedo y Partido Verde de Bolivia.
Pero, moderadamente positiva para el delfín del Partido Demócrata Cristiano, que continúa en ascenso respecto a los otros partidos de la oposición.
El estancamiento del postulante de la alianza UD parece restarle cualquier posibilidad de elevar su propio techo, anclado ahora en un 14 por ciento, después de perder, supuestamente, tres puntos.
El descenso vertiginoso del postulante de UD, también podría leerse en sentido de que el MAS penetró el nicho electoral de la clase media, en el que, la alianza de oriente y occidente cifraba sus esperanzas.
Rescatamos en el presente análisis, una vez más, la validez de los sondeos de opinión que, como en el caso de Mori, no hacen sino reafirmar la tendencia que se percibe en los cuatro puntos cardinales del país.
El 12 de octubre, probará sin atenuantes, que las tendencias políticas constituyen una percepción adelantada de los resultados finales, en los comicios que ya tocan las puertas del país.(Clovis Díaz)
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