El presidente Evo Morales dijo hoy al editor José Antonio Quiroga que si no lo traicionaba hoy sería su Vicepresidente. La afirmación la hizo durante la presentación de la lista de los 200 libros emblemáticos que formarán parte de la Biblioteca del Bicentenario de Bolivia (BBB), en presencia de Quiroga y del propio vicepresidente Álvaro García Linera, en Palacio de Gobierno.
El "compañero Juan José Quiroga (José Antonio Quiroga) ha sido mi candidato a Vicepresidente por dos horas el año 2002, me acuerdo perfectamente, imagínese hermano si no me traicionabas hubieras estado en vez de Álvaro García Linera, bueno son cosas de la política”. Esta declaración generó risas del público asistente, entre tanto Quiroga y el propio García Linera se mostraron serios.
José Antonio Quiroga es sobrino del líder socialista Marcelo Quiroga Santa Cruz, asesinado en el gobierno de Luis García Meza (1980-1981), después de quedar preso y torturado.
Durante la presentación de los 200 libros, Morales también dijo que no le gusta leer y que más bien le encanta guardar libros. "Con sinceridad no entiendo mucho de esto, no sé si mis profesores, profesoras no (me) enseñaron a leer mucho, no me gusta leer mucho, me gusta hacer leer, o que me lo lean, perdonen, para saber mejor, pero me gusta guardar libros, me encanta guardar libros, eso aprendí de Europa, en Europa cuando visitaba, en estas conferencias internacionales, en cada casa que visitaba tenía su biblioteca”, aseveró en presencia de un grupo de editores y escritores.
Sin embargo, reconoció que es difícil seleccionar 200 libros de un millar de textos escogidos desde la República hasta el presente. "Hay editores, escritores bolivianos que aportaron ante toda la historia de Bolivia para refrescar la memoria del pasado, quien sabe revisando el pasado (se puede) evaluar el presente y proyectar el futuro de Bolivia”.
Después el vicepresidente García Linera entregó un reconocimiento a cada uno de los 25 asistentes, entre ellos editores y escritores. Y, poco antes de que este grupo se tomara la fotografía oficial y recibiera el saludo del presidente Morales, José Antonio Quiroga abandonó el Palacio de Gobierno, como una forma de protesta contra la alusión.
No sólo eso, también el sacerdote jesuita Xavier Albó fue otro de los que salió apresuradamente del Palacio de Gobierno y cuando cruzaba las puertas, el vicepresidente García Linera le pidió que se quedara para celebrar la presentación de la lista de los 200 libros de la Biblioteca del Bicentenario de Bolivia. Albó le dijo: "tengo que ir al Ministerio de Justicia, de justicia”.
Rato antes, García Linera dijo que "en total son 200 títulos, más de 200 tomos, que intentan Presidente (Morales) brindar al público, a los jóvenes fundamentalmente, obras indispensables para conocer Bolivia”. Según García Linera, las 200 obras seleccionadas "son fundamentales" para el pueblo boliviano, por lo que indicó que en coordinación con el comité editorial se realizará una publicación de lujo de las obras y una publicación "de circulación popular".
Las idas y venidas
Efectivamente, Evo lo invitó a finales de febrero de 2002 para que le acompañara como candidato a Vicepresidente, pero José Antonio Quiroga lo rechazó pese a que una asamblea cocalera le había elegido. Entonces, Filemón Escóbar, el principal asesor político de Morales, le dijo que "cuando la asamblea te elige, no puedes decir no”. "Eso será en tu sindicato, pero yo no soy miembro”, le respondió Quiroga. Evo insistió con tenerlo en sus filas, le ofreció la Alcaldía de La Paz y una banca en el Senado, pero la negativa sobrevino en ruptura.
Un año antes de que Morales asumiera la presidencia, Quiroga había hecho una primera propuesta para la formación de un "frente amplio”, pues incorporó al MSM y seis alcaldes, entre ellos René Joaquino, pero el intento murió ante la deserción de Juan Del Granado, que terminó aliándose con el MAS.
Ocho años después, Quiroga reapareció como uno de los principales gestores de un nuevo intento unitario, bajo el mismo nombre de Frente Amplio, para enfrentar a Morales en 2014. Se lanzó con un grupo de intelectuales y militantes de la izquierda independiente, como Loyola Guzmán, para sumarse a Samuel Doria Medina. En junio de este año, Quiroga y Guzmán dejaron a Samuel y murió el Frente Amplio.
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