El presidente de Bolivia, Evo Morales, expresó ayer su solidaridad con su homólogo de Ecuador, Rafael Correa, porque, según dijo, encara en su país "un proceso de liberación" frente a lo que consideró fuerzas de la derecha.
"Nuestra solidaridad, mi respeto, mi admiración al presidente Correa", dijo Morales en una rueda de prensa, en la que también reiteró sus críticas al expresidente del Gobierno español Felipe González por haber apoyado en Venezuela a dirigentes opositores encarcelados.
Morales indicó que en los últimos días no pudo comunicarse con Correa, pero agregó que conoce su "fuerza social" y anunció que lo defenderá porque el mandatario encabeza un "proceso de liberación".
"La derecha nacional o internacional nunca se van a quedar con los brazos cruzados", consideró el gobernante boliviano.
El Presidente ecuatoriano anunció el lunes la retirada temporal de dos proyectos legales sobre las herencias y la plusvalía inmobiliaria, que desataron nutridas protestas de la oposición durante la semana pasada en varias ciudades del país.
Morales agregó que cuando surgen "los procesos de liberación" en América Latina, actúa "el imperio norteamericano" como ocurrió con el expresidente venezolano Hugo Chávez y con el actual, Nicolás Maduro, que, a su juicio, sufrieron varios tipos de agresiones. Asimismo, reiteró sus críticas al expresidente del Gobierno español Felipe González.
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