El presidente Evo Morales cuestionó a la Universidad Mayor de San Simón (UMSS) por convertirse en un espacio de “inseguridad” y “perversión” después de los conflictos de cuatro meses, que persisten, y generaron una mala imagen a la sociedad que ahora duda de la universidad pública.
“Seguramente muchos de ustedes estudiaron en las universidades públicas, pero éstas ahora dejan mucho que desear y no se pueden hacer muchas transformaciones, porque tienen su autonomía y en algunas ciudades están perjudicando bastante”, aseguró Morales.
Asimismo, dijo que muchos padres de familia dudan al momento de inscribir a sus hijos a la UMSS y que varios bachilleres prefirieron estudiar en universidades privadas para evitar “paros y peleas internas” de grupos que imperan al interior de la casa de estudios superiores.
El secretario general de la UMSS, Rolando López, explicó que el problema no es la autonomía universitaria, sino la ausencia de un reglamento de procesos universitarios, la cualificación del cogobierno y el incumplimiento a la normativa interna.
“Tal parece que la institución no puede superar su crisis, pero esto no tiene que ver con autonomía universitaria”, aclaró López.
Continuó: “Yo he podido constatar dos cosas después del conflicto: que hubo una fuga de alumnos a las universidades privadas y que no vamos a recibir la misma cantidad de estudiantes que recibíamos antes por los conflictos que persisten”.
El dirigente de la Federación Universitaria Local (FUL), Jarlín Coca, aseguró que la universidad atraviesa una profunda crisis, “porque las políticas aplicadas obedecieron a las líneas de los gobiernos de turno”.
“En todo momento más que el estatuto y la normativa, los intereses académicos e institucionales de la universidad siempre existen los apetitos de los grupos de poder y las roscas y en ese camino se ha ido agudizando cada vez más la crisis”, sostuvo Coca.
El Mandatario también cuestionó el receso que dispuso la UMSS luego de estar cuatro meses paralizada y con “docentes que cobraban sueldo sin trabajar”. Una resolución rectoral dispone una pausa del 21 de diciembre al 15 de enero.
Algunos docentes atribuyeron el receso al recurso que interpuso la FUL contra las autoridades que no tienen la titularidad para el cargo y que afectaría a unos 60 puestos. Asimismo, las facultades fueron notificadas con la suspensión de la competencia de los consejeros universitarios, mientras el Tribunal Constitucional define la observación a los cargos de docentes extraordinarios.
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